domingo, 26 de junio de 2016

Continuamos, mucho lío, poco tiempo, y encima, empieza la cosecha.

La crónica de hoy es doble, en tiempo, pero no en extensión, pues los acontecimientos y la cantidad de sucesos de éstos días están haciendo tomar a la campaña un tono bastante gris por no decir oscuro.

Los repentinos y bruscos cambios de temperatura y de precipitaciones han dado, a la ya pasada primavera, el calificativo de "muy fría" y "muy lluviosa". Hechos que han repercutido de manera muy especial en la construcción, la puesta y la cría de los aguiluchos.
 
 
Trigal donde anidan los aguiluchos. Foto: Miguel MG,


Todos estos factores han modificado el ritmo normal de la anidada de aguiluchos del año, y os lo podemos decir con seguridad, pues hemos encontrado nidos abortados, posiblemente por las abundantes y consecutivas borrascas que barrieron toda la península en la época de su construcción. Hace unos días encontrábamos un fallido nido de aguilucho pálido, con una precaria pero clara construcción, que fue trasladado seguramente por la cantidad de agua a escasos 5 metros, en una zona más favorable, donde 4 pollos crecían normalmente, pero con un cierto retraso en las fechas, por las lluvias.
 
Empaquetado de forraje de avena. Foto Miguel MG.


Si a todo lo dicho antes le sumamos la mayor cantidad de siega en verde, que se ha hecho por lo abundante de la cosecha y la calidad de la misma, dan como resultado un fiasco de temporada de cría para nuestros queridos aguiluchos. Incluso los laguneros, han visto como las repentinas subidas de caudal han mojado o arrasado sus lechos, echando a perder las primeras puestas, pero después parece que se han beneficiado de la protección que el abundante agua ha dado a sus fortalezas aisladas.

Por último en cuanto a malas noticias, algunos nidos han quedado demasiado expuestos, pues las lluvias acompañadas de fuertes vientos de finales de Mayo tumbaron muchas áreas del cereal, dejando a la vista las preciadas joyas que en algunos casos fueron depredadas como hemos comprobado, por la desaparición parcial de algunos nidos que han sido atacados, ya que algún individuo tuvo que ser rescatado al presentar fracturas en las alas a causa de un posible forcejeo al defenderse de la depredación.
 
Vigilancia del cereal donde cría el aguilucho. Foto: Miguel MG.
 
Pero no todo es negativo en ésta campaña, por el momento ya se han anillado varios nidos completos de 4 polluelos, uno de cada especie de aguiluchos, en los que solamente se anilló y marcó a los ejemplares, sin necesidad de avisar a los agricultores pues acabaron de crecer sumergidos en el mar de cereal, antes de ser cosechado.

No esperamos que la cosecha tarde en llegar mucho tiempo más, pues los forrajes de trigo-vallico o de avena ya se tumbaron y las cebadas empezarán ésta misma semana, seguimos trabajando para evitar que varios nidos en peligro por estar en cebadas, sean decapitados, y esperamos que los que tenemos localizados en campos de trigo aguanten unas dos semanas más, en lo que el trigo y los pollos que esconde, acaban de madurar.
 
Campo de cebada próximo a ser cosechado. Foto: Miguel MG.
 
Por último deciros que la cantidad de parejas que hemos visto es menor que el pasado año, y en muchas zonas habituales no hay tantos como el año pasada, además han variado la ubicación de las colonias, lo cual hemos constatado en dos de las zonas que prospectamos.

Esperamos que la próxima entrada nos depara contaros muchos éxitos en los próximos días, tenemos trabajo y calores muy duros por delante.
 
 
Hasta pronto amigos.
Miguel Mangas.
 

1 comentario:

  1. No perdáis la fe y la esperanza, que lo que hacéis tendrá recompensa. Mucho ánimo.

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